TARTA DE MOJITO

viernes, mayo 13, 2022

Esta fue la tarta que preparé para celebrar mi cumpleaños.

A pesar de ser una tarta de bizcochos tiene unos sabores muy frescos y quedó deliciosa.

Eso sí, no es una tarta apta para que la consuman los niños porque lleva alcohol.

Es bastante sencilla de preparar aunque como siempre requiere de una cierta planificación porque debemos dejar enfriar la ganaché durante una noche antes de montarla. Lo mejor es preparar los bizcochos, el almíbar y la ganaché el día antes del montaje.

Los ingredientes que usé fueron: (Para una tarta de 15 cm).

Para los bizcochos: (Todos a temperatura ambiente)

200 gr. de mantequilla sin sal.
250 gr. de azúcar.
Cuatro huevos talla L.
250 ml. de leche y 15 ml. de zumo de limón.
300 gr. de harina.
Una cucharadita y media de levadura.
Una pizca de sal.
Ralladura de una lima.

Para la ganaché de mojito: (Esta receta la vi en el perfil de instagram de @dolceannakatherina y adapté las cantidades para que me diera para el relleno y decoración de la tarta)

510 gr. de chocolate blanco.
660 gr. de nata para montar.
60 gr. de ron blanco.
60 gr. de zumo de lima.
Unas 20 hojas de hierbahuerto.
9 gr. de gelatina en hojas.

Para el almíbar de ron:

125 gr. de agua.
125 gr. de azúcar.
30 gr. de ron blanco.

Para la decoración:

Una o dos limas.
Hojas de hierbahuerto.

Vamos a empezar preparando los bizcochos.

Ponemos el horno a calentar a 180º.

En una jarra ponemos la leche tibia y añadimos el limón. Removemos y dejamos que repose hasta que se corte.

Mientras preparamos tres moldes de 15 cm. forrando la base con papel y engrasando los laterales.

En un bol ponemos la mantequilla con el azúcar y la ralladura de lima. Batimos hasta que blanquee.

Vamos añadiendo los huevos de uno en uno, no añadiendo el siguiente hasta que el anterior esté integrado.

En un bol tamizamos la harina con la levadura y añadimos la pizca de sal.

Vamos añadiendo la mezcla de harina y de leche intercalándolas. Primero un tercio del harina, luego la mitad de la leche, otro tercio del harina, el resto de la leche y, para finalizar, el resto del harina.

Terminamos de integrar la masa con una espátula para asegurarnos que no quedan restos en el fondo.

Repartimos la masa en los moldes y horneamos durante unos 30 minutos, hasta que al pincharlos con un palillo salga limpio.

Sacamos y dejamos enfriar 10 minutos sobre una rejilla.

Pasado el tiempo los desmoldamos y los dejamos enfriar por completo. Luego los envolvemos en papel film y los reservamos a temperatura ambiente hasta el día siguiente.

Para el almíbar ponemos todos los ingredientes en un calentador y lo llevamos al fuego. Dejamos hervir un par de minutos y enfriamos. Lo reservamos en la nevera hasta el día siguiente.

Para la ganaché, ponemos la nata y el hierbahuerto en un calentador. Calentamos hasta que llegue al hervor, apagamos y dejamos infusionar unos diez minutos.

Mientras se infusiona ponemos las hojas de gelatina a hidratar en agua. (No hay foto).

Pasado el tiempo volvemos a calentar la mezcla.

En otro bol ponemos el chocolate troceado, añadimos la gelatina escurrida.

Vertamos la nata infusionada y añadimos el ron y el zumo de lima.

Dejamos reposar un par de minutos y luego le pasamos el brazo de la batidora, con las cuchillas, para emulsionar todo muy bien.

Trasladamos la crema a un tupper. Pueden dejarla tal cual o, como en mi caso, colarla para evitar los trocitos de hojas que no se trituran.

La cubrimos con papel film, pegado a la crema, y llevamos a la nevera hasta el día siguiente.

Al día siguiente la ganaché estará muy cremosa.

Ya con todo preparado empezamos por el montaje.

Ponemos la crema en un bol y la batimos con varillas eléctricas hasta que esté montada.

Manchamos con un poco de crema la bandeja donde vamos a presentar la tarta, colocamos uno de los bizcochos y lo pintamos bien con el almíbar.

Ponemos una capa de crema (yo lo hago con una manga) y la alisamos bien con una espátula.

Seguimos colocando el siguiente bizcocho, lo pintamos con el almíbar, ponemos la crema y terminamos con el último bizcocho que también pintaremos con el almíbar.

Damos una primera capa de crema a la tarta, fina para recoger las migas. Llevamos a la nevera por una media hora.

Luego le damos una segunda capa ahora más gruesa y la alisamos bien con una espátula.

Ponemos la crema restante en una manga con boquilla estrellada y hacemos motas sobre toda la parte superior de la tarta.

Para rematar la decoración de la tarta colocamos rodajas de lima, cortadas a cuartos, y hojitas de hierbabuerto sobre los topos de crema.

Ya tenemos nuestra tarta lista para disfrutarla.

La conservaremos en la nevera hasta el momento de servirla.

Miren lo bonita que luce con esta decoración tan sencilla.

Y miren el corte que aunque la foto la hice en medio de la celebración se aprecia perfectamente lo jugosa que queda.

Y como no puede haber cumpleaños sin su correspondiente vela aquí estoy yo con mi niña soplando y dando la bienvenida a mis 51 años.

Una tarta deliciosa con unos sabores muy frescos.

Carolina López Rodríguez

Las recetas que he ido seleccionando para este blog han sido las que he considerado más sencillitas y rápidas, aunque de vez en cuando me atrevo con alguna un poco más elaborada.
Espero que les gusten y si a alguien les son útiles me alegraré mucho.