Me encanta fusionar postres distintos porque, en la mayoría de las ocasiones, se obtienen unos resultados increíbles.
En este caso he preparado el relleno de un strudel, con sus manzanas y sus frutos secos, y lo he puesto en la parte superior de una cheesecake antes de hornearla.
El resultado es esta maravilla que les traigo hoy. Ya he perdido la cuenta de las veces que la he preparado y siempre ha triunfado.
Los ingredientes que usé fueron: (Para un molde de 15 cm alto o uno de 18) (Si quieren doblar los ingredientes aconsejo utilizar un molde de 22 cm).Para el relleno de strudel:
- Dos manzanas pequeñas.
- Un trozo de mantequilla como del tamaño de una nuez.
- Tres cucharadas de azúcar moreno.
- Un puñado de pasas sultanas.
- Un puñado de nueces picadas con las manos.
- Una cucharada de postre de canela.
- 300 gr. de queso crema.
- 85 gr. de azúcar.
- Un huevo talla L.
- Una cucharada sopera de harina (o maicena también vale).
- 200 ml. de nata para montar.
- Un chorrito de vainilla.
Pelamos y cortamos las manzanas en cubitos.
Ponemos la mantequilla en una sartén y la dejamos que se vaya derritiendo.
Añadimos las manzanas, las pasas, las nueces, el azúcar y la canela y removemos todo bien.
Dejamos cocinar a fuego medio-bajo hasta que la manzana esté blandita, removiendo de vez en cuando. Dejamos enfriar.
Espolvoreamos la harina y mezclamos.
Vertemos la nata y la vainilla y mezclamos hasta que esté todo integrado.
Vertemos la mezcla en el molde. (Si no es de silicona como el mío le tendrán que forrar el fondo y engrasar los laterales.
Ponemos la mantequilla en una sartén y la dejamos que se vaya derritiendo.
Añadimos las manzanas, las pasas, las nueces, el azúcar y la canela y removemos todo bien.
Dejamos cocinar a fuego medio-bajo hasta que la manzana esté blandita, removiendo de vez en cuando. Dejamos enfriar.
Vamos ahora con la cheesecake.
Precalentamos el horno a 180º.
Ponemos en un bol el queso con el azúcar y mezclamos con varillas manuales.
Cascamos el huevo y seguimos batiendo hasta que se integre.Espolvoreamos la harina y mezclamos.
Vertemos la nata y la vainilla y mezclamos hasta que esté todo integrado.
Vertemos la mezcla en el molde. (Si no es de silicona como el mío le tendrán que forrar el fondo y engrasar los laterales.
Repartimos el relleno sobre la crema de queso.
Cubrimos con papel de aluminio y llevamos al horno durante unos 40 minutos. Si queremos los últimos 10 minutos le podemos quitar el papel para que se dore un poco.
Apagamos el horno y dejamos con la puerta entreabierta hasta que se enfríe.
Cubrimos con papel de aluminio y llevamos al horno durante unos 40 minutos. Si queremos los últimos 10 minutos le podemos quitar el papel para que se dore un poco.
Apagamos el horno y dejamos con la puerta entreabierta hasta que se enfríe.
Luego la llevamos a la nevera hasta el día siguiente.
Desmoldamos nuestra tarta y ya la tenemos lista.
Miren cómo luce el relleno en lo alto de la tarta.
Nos cortamos un trozo y disfrutamos.
Queda con una cremosidad increíble además que la combinación de sabores queda deliciosa.
Desmoldamos nuestra tarta y ya la tenemos lista.
Miren cómo luce el relleno en lo alto de la tarta.
Nos cortamos un trozo y disfrutamos.
Queda con una cremosidad increíble además que la combinación de sabores queda deliciosa.
Un postre fusión para disfrutar a cada bocado.