SBRICIOLATA DE CABELLO DE ÁNGEL
viernes, enero 29, 2021 Había comprado un bote de cabello de ángel con la intención de preparar en Navidad un dulce tradicional. Finalmente no me dio tiempo a prepararlo y ahí que quedó en la despensa sin usar.
Para darle salida se me ocurrió hacer una versión de este pastel típico italiano.
Se trata de un dulce formado con migas de masa para el que no necesitaremos ningún tipo de aparato para realizarlo.
El resultado, a la vista está, un pastel con un acabado rústico y con un sabor espectacular. De hecho los que lo probaron repitieron.
Los ingredientes que usé fueron:
- 400 gr. de harina.
- 100 gr. de azúcar.
- Un sobre de levadura tipo Royal.
- Una cucharadita de canela.
- Una pizca de sal.
- 120 gr. de mantequilla fría.
- 2 huevos talla L.
- 500 gr. de cabello de ángel.
Preparamos un molde desmontable de 24-25 cm, untándolo con mantequilla o, como en mi caso, forrándolo con papel de horno. Yo lo que suelo hacer es mojar el papel antes de colocarlo en el molde, lo escurro y luego lo coloco. De esta forma se quedan bien marcados los surcos.
En un bol tamizamos la harina, la levadura y la canela.
Añadimos la pizca de sal y el azúcar y mezclamos.
Echamos la mantequilla cortada en trocitos.
Vamos trabajando con las manos, frotando la mantequilla sobre la mezcla para que se vaya integrando.
Cascamos los huevos en un bol y los batimos. Los añadimos a la mezcla.
Vamos integrando, primero con la espátula y luego con las manos hasta que nos queden una especie de migas gruesas.
Calculamos más o menos dos tercios de las migas y las repartimos en el molde, presionando con las manos para que se compacten, tanto en la base como en todo el borde.
Repartimos el cabello de ángel sobre la base que hemos hecho y lo alisamos con una espátula o con el dorso de una cuchara.
El resto de migas que nos quedan las repartimos por la parte superior intentando que cubra todo el cabello. En este caso no tenemos que presionarlas, solamente distribuirlas por toda la superficie.
Llevamos al horno y dejamos que se cocine durante unos 40-45 minutos, hasta que veamos que queda doradita.
Sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla, dentro del molde.
Cuando esté completamente fría la desmoldamos y la pasamos a un plato de presentación.
Esas migas doraditas lucen preciosas.
Y miren ese corte, con el cabello asomando. Aquí un poquito más de cerca.
Un pastel con una textura y un sabor impresionante. La mezcla de las migas con el toque de canela y el cabello queda espectacular.
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