TARTA ADIKOSH (6º ANIVERSARIO DESAFÍO EN LA COCINA)
domingo, mayo 20, 2018
La propuesta que hemos hecho este mes al grupo Desafío en la Cocina ha sido hacer una Tarta Adikosh o Tarta de números y letras, la que ha surgido como la Tarta tendencia en este 2018.
La particularidad es que todas tenían que ir con la forma de un seis porque con este Desafío celebramos nuestro 6º Cumpleaños.
Pues sí, seis añitos ya.
Quién nos iba a decir a nosotras que después de seis años íbamos a seguir aquí, proponiendo cada mes una receta y disfrutando con cada una de ellas.
Así que hoy toca celebrar y, como no puede ser de otra manera, con una tarta estupenda.
En mi caso, para elaborarla he recurrido a las bases de galleta y, para el relleno, a una cremita aromatizada con el sabor fresco e intenso de la lima. Eso, junto con los frutos rojos de la decoración, forman una combinación estupenda.
Los ingredientes que usé fueron:
Para la masa de galletas: (Usé la receta que utilizo normalmente para las galletas decoradas)
- 250 gr. de mantequilla a temperatura ambiente (yo usé sin sal).
- 175 gr. de azúcar glass.
- Un huevo normal y una yema.
- 550 gr. de harina normal.
- Esencia (en mi caso puse una cucharada de postre de vainilla líquida).
- 500 ml. de nata para montar fría. (Yo utilicé en esta ocasión vegetal).
- 300 gr. de queso crema.
- La ralladura de una lima y su zumo.
- Dos cucharadas bien generosas de azúcar glass. (Puse sólo esta cantidad porque la nata era azucarada. Si no es tu caso añade unos 80-100 gr. de azúcar)
- Unas gotas de colorante verde (opcional).
- Frutos rojos variados, en este caso, fresas, moras, arándanos y frambuesas.
- Galletas hechas con los recortes de hacer las bases y rebozadas con perlitas de colores.
- Merengues secos hechos con la clara sobrante de la masa de galleta.
Nota: Antes de empezar con la preparación tienen que imprimir y recortar un número 6, del modelo que más les guste. Yo lo bajé de la red y lo hice del tamaño de un folio DinA4.
Lo primero que tenemos que preparar son las bases de galleta.
Ponemos la mantequilla, ablandada a temperatura ambiente, en un bol. La batimos hasta que esté cremosa.
Tamizamos el azúcar glass a través de un colador.
Vamos añadiendo el azúcar a cucharadas mientras seguimos batiendo a velocidad baja. No debemos introducir aire en la masa, por eso lo de trabajar a baja velocidad.
En un bol batimos el huevo y la yema ligeramente.
Lo añadimos a la mezcla y seguimos batiendo hasta que esté bien integrado.
Tamizamos también el harina, dejándola caer en un bol.
La vamos añadiendo poco a poco, batiendo despacio.
Una vez añadida toda la harina, acabamos de mezclar con las manos o una espátula, hasta obtener una masa que no se pegue a las paredes del bol.
Sacamos la masa del bol, formamos una bola con ella y la cortamos en dos trozos.
Formamos un cilindro con cada una y la colocamos sobre papel de horno. Cubrimos con otro papel.
Estiramos con un rodillo hasta un grosor de 6 mm. y teniendo en cuenta que nos quepa la plantilla. Colocamos la masa estirada en una bandeja y la llevamos a la nevera durante al menos tres horas.
Pasado el tiempo, retiramos el papel superior y colocamos la plantilla sobre la masa. También ponemos el horno a calentar a 170º.
Con un cuchillo vamos "dibujando" el contorno del seis para que se recorte. Una vez pasado por toda la superficie retiramos el papel.
Con cuidado, retiramos los trozos que sobran y deslizamos el seis sobre una bandeja.
Llevamos al horno y dejamos que se cocine durante unos trece- catorce minutos, hasta que veamos que los bordes se van poniendo doraditos.
Sacamos del horno y dejamos reposar en la bandeja unos minutos. Luego deslizamos sobre una rejilla y dejamos enfriar completamente. Hay que tener en cuenta que tenemos que manipularlos con cuidado para que no se rompan, aunque, según como, se puede arreglar.
Preparamos igual la segunda base.
Una vez las bases preparadas, podemos empezar con la crema.
En un bol ponemos el queso crema, el zumo y la ralladura de lima y el azúcar. Removemos con una espátula hasta que nos quede cremosito.
En otro bol vertemos la nata y la empezamos a montar con varillas.
Cuando esté a medio montar añadimos la mezcla del queso y, si queremos, un poco de colorante verde para resaltar el color.
Seguimos batiendo hasta que quede todo integrado.
Metemos la crema en una manga con boquilla redonda y dejamos en la nevera.
Para montar la tarta manchamos con un poco de crema la bandeja de servir y colocamos uno de los seis. De esta manera conseguiremos que no se nos resbale.
Empezamos a poner montoncitos de crema por todo el borde del seis y luego rellenamos el interior.
Cubrimos, con cuidado, con el otro seis.
Igual que antes, rellenamos primero los bordes y luego el interior.
Para acabarla sólo nos queda añadirle la decoración elegida.
En mi caso utilicé frutos rojos, unas galletas y merengues secos.
Queda una tarta muy llamativa y muy colorida.
Desde cualquier ángulo se ve preciosa.
Y lo que parece el "gran temor", el corte. No se desmorona al cortarla. La galleta, con la crema, se ablanda un poco y permite que la cortemos sin problema. Miren "la prueba".
Y lo mejor de todo es que, no sólo sorprendemos por lo llamativa que es, sino que además está buenísima.
Pues esta es mi aportación para el 6º Aniversario de Desafío en la Cocina. Ahora les invito a que se pasen por nuestro blog y vean los maravillosos seis que han hecho todas las compañeras.
También les recuerdo que Desafío en la Cocina vuelve el próximo 20 de junio, con nuestro último Desafío antes de las vacaciones.
1 No te cortes y deja tu comentario.
Preciosa, como cada tarta que haces, Carol.
ResponderEliminarY yo me pregunto ¿Dónde conseguiste los merengues secos? Por que aquí no hubo manera de encontrarlos...
Muchísimas gracias por dejar tu comentario.