PASTEL DE ARÁNDANOS CON STREUSEL
viernes, febrero 16, 2018
(Receta reeditada el 16 de julio de 2019)
Este tipo de pasteles que llevan por encima la capita de streusel o migas me encanta. Además combinados con distintas frutas tenemos opciones completamente diferentes. En el blog tengo ya la versión con fresas y la versión con manzanas.
En este caso me he decantado por los arándanos que le dan un puntito genial.
Bien es cierto que este no es un pastel para presentar como postre después de una comida, porque es bastante denso. Pero para una merienda con un café, té o chocolate calentito está tremendo.
Los ingredientes que usé fueron:
Para el streusel:
Vamos trabajándolo con las manos hasta que obtengamos una mezcla con apariencia de migas.
Metemos el bol en el congelador mientras seguimos con el resto.
Ponemos a calentar el horno a 170º.
Para la base, ponemos la mantequilla con el azúcar y la ralladura de limón en un bol.
Batimos hasta que esté bien cremoso.
Incorporamos los huevos de uno en uno, no añadiendo el siguiente hasta que se integre el anterior.
Tamizamos el harina y la levadura sobre la mezcla.
Vamos uniendo con una espátula hasta que esté todo bien integrado. El resultado es una mezcla bastante densa.
Engrasamos un molde y lo forramos con papel de horno, para que luego nos sea más fácil desmoldar.
Echamos la mezcla en el molde y la repartimos por toda la superficie con ayuda de una espátula. Intentaremos que nos quede lo más nivelada posible.
Para el relleno, ponemos todos los ingredientes en una jarra.
Batimos con el brazo de la batidora, con el accesorio de cuchillas, hasta que nos quede bien homogéneo.
Repartimos los arándanos, bien lavados, sobre la masa que tenemos en el molde.
Regamos con el relleno que tenemos en la jarra.
Sacamos las migas que tenemos en el congelador y las repartimos por encima, separándolas con los dedos si se han quedado pegadas al enfriar.
Metemos en el horno y dejamos cocinar sobre unos 50 minutos. Como siempre, comprobamos que está lista pinchándola con una brocheta, que tiene que salir limpia.
Dejamos que tibie un poco y desmoldamos el pastel ayudándonos del papel. Dejamos enfriar sobre una rejilla.
Luego la trasladamos a un plato y a disfrutar de este rico pastel.
Este es el corte que tiene.
Me encanta encontrar la frescura de los arándanos al morderlo.
Este tipo de pasteles que llevan por encima la capita de streusel o migas me encanta. Además combinados con distintas frutas tenemos opciones completamente diferentes. En el blog tengo ya la versión con fresas y la versión con manzanas.
En este caso me he decantado por los arándanos que le dan un puntito genial.
Bien es cierto que este no es un pastel para presentar como postre después de una comida, porque es bastante denso. Pero para una merienda con un café, té o chocolate calentito está tremendo.
Los ingredientes que usé fueron:
Para el streusel:
- 125 gr. de harina.
- 100 gr. de mantequilla fría.
- 100 gr. de azúcar.
- 375 gr. de harina.
- Una cucharadita de levadura.
- Tres huevos talla L.
- 185 gr. de mantequilla a temperatura ambiente.
- 150 gr. de azúcar.
- Ralladura de limón.
- 150 gr. de queso de untar. (He vuelto a hacerla y le he añadido el doble de queso, es decir, 300 gr. y queda aún más rica. El resto de ingredientes se mantiene igual)
- Dos huevos talla L.
- 75 gr. de azúcar.
- 100 ml. de nata para montar.
- Unos 125 gr. de arándanos frescos.
Vamos trabajándolo con las manos hasta que obtengamos una mezcla con apariencia de migas.
Metemos el bol en el congelador mientras seguimos con el resto.
Ponemos a calentar el horno a 170º.
Para la base, ponemos la mantequilla con el azúcar y la ralladura de limón en un bol.
Batimos hasta que esté bien cremoso.
Incorporamos los huevos de uno en uno, no añadiendo el siguiente hasta que se integre el anterior.
Tamizamos el harina y la levadura sobre la mezcla.
Vamos uniendo con una espátula hasta que esté todo bien integrado. El resultado es una mezcla bastante densa.
Engrasamos un molde y lo forramos con papel de horno, para que luego nos sea más fácil desmoldar.
Echamos la mezcla en el molde y la repartimos por toda la superficie con ayuda de una espátula. Intentaremos que nos quede lo más nivelada posible.
Para el relleno, ponemos todos los ingredientes en una jarra.
Batimos con el brazo de la batidora, con el accesorio de cuchillas, hasta que nos quede bien homogéneo.
Repartimos los arándanos, bien lavados, sobre la masa que tenemos en el molde.
Regamos con el relleno que tenemos en la jarra.
Sacamos las migas que tenemos en el congelador y las repartimos por encima, separándolas con los dedos si se han quedado pegadas al enfriar.
Metemos en el horno y dejamos cocinar sobre unos 50 minutos. Como siempre, comprobamos que está lista pinchándola con una brocheta, que tiene que salir limpia.
Dejamos que tibie un poco y desmoldamos el pastel ayudándonos del papel. Dejamos enfriar sobre una rejilla.
Luego la trasladamos a un plato y a disfrutar de este rico pastel.
Este es el corte que tiene.
Me encanta encontrar la frescura de los arándanos al morderlo.
1 No te cortes y deja tu comentario.
UMMMMMMMMMMM que rico¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
ResponderEliminarMuchísimas gracias por dejar tu comentario.