TARTA DE VAINILLA Y CARAMELO

viernes, noviembre 10, 2017

   Yo creo que ya va siendo hora de que les enseñe la tarta que le preparé a Laura para su 10º cumpleaños que fue a finales de septiembre y, si me descuido, se me junta con la del año próximo.
   Este año no me lo puso difícil, la verdad. Sólo había dos premisas a cumplir: la tarta tenía que ser verde y de UmiZoomi.
   El color no fue problema. El problema eran las figuritas de los personajes. Pero allí estaba Nardy, de La Cocinita Cupcakes y me dio una idea. Imprimir los dibujos en papel de azúcar y luego pegarlos sobre pasta de goma. Y funcionó y además quedó genial. 
   Los ingredientes que usé fueron:
Para los bizcochos:

  • 345 gr. de harina.
  • 300 gr. de azúcar glass.
  • Una cucharada de levadura química.
  • Una pizca de sal.
  • 200 gr. de mantequilla fría.
  • Dos cucharadas de aceite de girasol.
  • 300 ml. de leche tibia más una cucharadita de zumo de limón.
  • Dos cucharaditas de pasta de vainilla.
  • Cinco huevos a temperatura ambiente.
Para la crema de caramelo: (Yo la preparé de dos veces, cada una con la mitad de ingredientes, porque sólo coloreé la crema exterior)
  • 400 gr. de mantequilla a temperatura ambiente.
  • 400 gr. de queso crema (entero) muy frío.
  • 600 gr. de azúcar glass.
  • Una cucharadita y media de pasta de caramelo (La puedes comprar en La Cocinita Cupcakes).
  • Colorante (opcional).
Para la decoración: (Todo lo encontrarás sin problema en La Cocinita Cupcakes)
  • Dibujos impresos en papel de azúcar.
  • Pasta de goma.
  • Fondant blanco. 
   Empezaremos por los bizcochos.
   Preparamos tres moldes (estos de 22 cm) engrasándolos y forrando la base con papel de horno.
   También ponemos a calentar el horno a 170º.
   Cascamos en un bol los huevos y los mezclamos con el aceite. Reservamos.
   En una jarra ponemos la leche con el zumo de limón. (Pasado un rato tendrá aspecto como de cortada. Eso está bien). Reservamos.
   En un bol amplio tamizamos el harina, el azúcar, la levadura y la sal.
   Cortamos la mantequilla fría en cubitos y la echamos.
   Vamos mezclando hasta que obtengamos uno compuesto con pinta arenosa.
   Vertemos en el bol la leche y mezclamos.
   También vertemos la mezcla de huevos y la vainilla.
   Mezclamos hasta que tengamos una masa sin grumos. Debemos rebañar el fondo para que no nos queden partes sin mezclar.
   Repartimos la masa en los tres moldes, poniendo la misma cantidad en cada uno.
   Los vamos horneando, de uno en uno, durante veinte minutos. Al pincharlos con un palillo éste debe salir listo.
   Sacamos y dejamos unos cinco minutos sobre una rejilla.
   Lo desmoldamos dándole la vuelta sobre una rejilla y retiramos el papel.
   Hacemos lo mismo con los otros bizcochos y los dejamos enfriar completamente.
   Si los preparamos el día antes, una vez fríos, los envolvemos con papel film y los dejamos a temperatura ambiente hasta el día siguiente.
 Para la crema, ponemos la mantequilla en un bol y la batimos hasta que esté bien cremosa.
   Añadimos el azúcar glass, tamizándola primero.
   Mezclamos bien, primero con una espátula y luego con la batidora hasta que se integren bien los dos ingredientes.
   Añadimos el queso frío y la pasta de caramelo. También si queremos colorear la crema añadimos el colorante en este punto.
   Batimos bien hasta que esté cremosita. De vez en cuando, rebañar el fondo del bol para que no nos queden partes sin mezclar.
   Para el montaje de la tarta, colocamos un primer bizcocho sobre la base. Primero la manchamos con un poco de crema para que no se ruede.
   Repartimos la crema sobre el bizcocho. La alisamos con una espátula.
   Hacemos igual cada capa, acabando con bizcocho. Este último, lo colocamos al revés para que nos quede bien recta.
   Damos una primera capa, muy fina, por toda la tarta. Dejamos en la nevera al menos media hora.
   Damos una segunda capa, en este caso verde, y volvemos a dejar media hora en la nevera.
   Damos la última capa de crema, intentando que nos quede lo más lisa posible.
   En mi caso, como les conté, como decoración puse las figuras hechas con papel de azúcar y pasta de goma. También modelé una cuantas bolas de fondant blanco, que puse alrededor de la base y unas estrellas que repartí aleatoriamente.
   Mi hija quedó encantada con su tarta, créanme.
   Y aquí la foto del corte. Quedaron unos bizcochos muy ricos que combinaban genial con la crema de caramelo.
   Y como no podía faltar, y para no perder la costumbre, la foto del momento vela.
   Una tarta deliciosa para hacer feliz a mi pequeña.

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2 No te cortes y deja tu comentario.

  1. Te ha quedado genial, seguro que estaba muy feliz la niña. Un besazo.

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  2. Preciosa como no podía ser menos viniendo de tus manos.
    Laura está preciosa.
    Muchisimas felicidades a vuestra niña, se te va haciendo mayor Carolina, disfrutarla al máximo que el tiempo vuela y se nos van de casa antes de darnos cuenta.
    Miles de besos a los tres, a ver si tenemos oportunidad de vernos otra vez.

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