TARTA SOFÍA CON BIZCOCHOS DEGRADADOS

viernes, octubre 09, 2015


 Esta ha sido la tarta de mi pequeña princesa para su octavo cumpleaños.
   -Para el próximo cumpleaños quiero... una tarta de Sofía.
   - ¿De qué color, cielo?
   -Violeta.
   Pues nada, ahí está la mami para prepararle la tarta a la nena con la dosis necesaria de cariño y amor.
   Este año no me podía complicar demasiado con la decoración y, en principio, tenía claro que utilizaría una oblea. Sin embargo, vi unas muñequitas con un tamaño genial para la tarta así que me decanté por ellas, acompañadas de una serie de cintas de distintos tonos de violeta para alegrarlas.
   La verdad es que es una decoración bien sencilla pero resulta muy llamativa a la vez que queda muy bonita.
   Para el relleno y la cobertura utilicé la siempre recurrente crema de queso que suele gustar a casi todo el mundo. Aunque la tengo en otras tartas, les pongo aquí también la receta para si se animan a hacer algo parecido la tengan a mano.
   Los ingredientes que usé fueron:
Para los bizcochos: (Pongo las cantidades que se necesitan para un solo bizcocho, pero hay que tener en cuenta que tenemos que hacer tres, por lo que a la hora de comprar habrá que multiplicar).

  • 170 gr. de mantequilla a temperatura ambiente.
  • 200 gr. de azúcar.
  • Cuatro huevos M a temperatura ambiente.
  • 170 ml. de leche.
  • 215 gr. de harina.
  • 10 gr. de levadura química, tipo Royal.
  • Unas gotas de esencia de caramelo.
  • Colorante en pasta color violeta.
Para el almíbar:

  • 100 ml. de agua.
  • 100 gr. de azúcar.
  • Unas gotas de esencia de caramelo.
Para la crema de queso y decoración final:

  • 800 ml. de nata para montar muy fría.
  • 500 gr. de queso crema tipo Philadelphia.
  • 500 gr. de queso mascarpone.
  • 230 gr. de azúcar glass.
  • Dos cucharadas de vainilla líquida.
  • 200 ml. de nata vegetal.
  • Unas gotas de colorante en pasta violeta.
  • Perlas de azúcar.
   Los bizcochos y la crema los preparé el día antes y luego monté la tarta el día que la íbamos a comer a mediodía.
   Empezamos por los bizcochos.
   Precalentamos el horno a 170º.
   Forramos la base de un molde desechable con papel de horno. Primero pintamos un poco con mantequilla el molde para que no se mueva el papel.
   Los moldes los compro en Mercadona, tienen unos dos litros y medio de capacidad.
   En un bol amplio ponemos la mantequilla y el azúcar. Batimos hasta que tengamos una mezcla cremosa.
   Separamos las yemas de las claras de huevo. Las claras las reservamos en un bol.
   Vamos añadiendo las yemas a la mantequilla con azúcar, de una en una. No añadimos la siguiente hasta que la anterior está integrada.
   Añadimos un poco de colorante violeta a la mezcla y seguimos batiendo. Para conseguir el efecto degradado, al siguiente bizcocho le añadimos un poco más de colorante y al tercero un poco más.
   Echamos también unas gotas de esencia de caramelo.
   Tamizamos el harina y la levadura juntas.
   Ahora iremos añadiendo el harina y la leche de manera alterna, de unas tres veces cada uno.
   Terminamos de integrar con una espátula.
   Las claras que teníamos reservadas las montamos a punto de nieve firme con las varillas eléctricas.
   Las incorporamos a la mezcla de dos veces.
   Las vamos integrando con movimientos envolventes, hasta que quede homogéneo.
   Vertemos la mezcla en el molde preparado. Alisamos con una espátula y damos unos pequeños golpes contra la encimera para que se deshagan las posibles burbujas.
   Metemos al horno de 20 a 25 minutos, hasta que al pinchar el bizcocho con una brocheta ésta salga limpia.
   Dejamos que se tibie sobre una rejilla.
   Damos la vuelta al molde sobre una rejilla, retiramos el papel del fondo y dejamos enfriar completamente.
   Preparamos y horneamos de la misma manera los otros dos bizcochos, sin olvidar que cada vez tendremos que añadir un poco más de colorante.
   Cuando estén completamente fríos, los envolvemos en papel film y los dejamos a temperatura ambiente hasta el día siguiente.
   Para la crema ponemos en un bol los dos tipos de queso con el azúcar glass tamizado y la vainilla.
   Batimos bien con la batidora, con el accesorio de cuchillas hasta que obtengamos una crema. Al principio nos costará un poco, pero luego se irá integrando.
   En otro bol montamos la nata bien firme.
   La añadimos al bol de la crema de queso.
   Vamos mezclando con la espátula hasta obtener una crema homogénea. La dejamos enfriar en la nevera. Yo la preparé también el día antes para que cogiera consistencia. 
   El día que vamos a montar la tarta preparamos un almíbar poniendo el agua, el azúcar y la esencia en un calentador. Lo llevamos al fuego y dejamos que hierva durante unos cinco minutos. Dejamos que se temple.
   Vamos ya con el montaje de la tarta.
   Preparamos la bandeja donde vamos a servir la tarta con unas blondas. Yo en este caso pongo dos superpuestas.
   Primero manchamos un poco la bandeja con algo de la crema para que luego no nos resbale.
   Colocamos el bizcocho más oscuro en la bandeja y ponemos alrededor unos trozos de papel de aluminio para no manchar las blondas.
   Pintamos el bizcocho con el almíbar. No se trata de calarlo. Lo que pretendo es acentuar el sabor a caramelo. Los bizcochos quedan tan jugosos que no necesitan calado.
   Ponemos un poco de crema sobre el bizcocho, en este caso, tres bolas hechas con una cuchara de servir helados.
   Extendemos la crema con una espátula.
   Hacemos lo mismo con el resto de bizcochos, terminando con el más claro y cubrimos toda la tarta con crema, la parte de arriba y los laterales.
   Dejamos enfriar en la nevera una hora.
   Le damos una segunda capa de crema a la tarta.
    La decoración es la misma que hice para la Tarta al caramelo, de hecho esta foto es de esa tarta porque se me pasó hacerla. Puse el resto de la crema en una manga con boquilla de estrella e hice líneas verticales desde la base hacia el borde superior. Luego alrededor, en la parte superior hice pequeñas ondas. 
   La diferencia es que en la base y en la parte superior hice motas con nata vegetal teñida de violeta y le coloqué unas perlitas de azúcar.
   Sólo nos queda colocar la decoración. En este caso, las muñequitas, a las que forré la base con papel film para que no se estropearan.
   Las cintas las coloque sobre un trozo de cartulina que también forré con papel film.
   Con un lápiz pastelero escribí el nombre de mi princesa.
   Aquí se ve un poquito más de cerca la decoración. Como ven no es nada complicada y sin embargo queda muy llamativa.
   Y aquí el corte de la tarta, en el que se aprecian los distintos colores de los bizcochos.
   Pues un año más mi niña ha tenido la tarta que quería hecha por su mami, que además de quedar bonita estaba deliciosa.

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8 No te cortes y deja tu comentario.

  1. Carolina, te quedó genial. Tu princesa encantada y disfrutando de que su mami le haga esa tarta tan especial. Sabes, me dio la risa con el color de los bizcochos porque me hizo acordarme una vez que lo intenté hacer malva y me quedó verde, jejeje. Besiños, buen fin de semana.

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  2. 8 añitos ya, se te hace mayor Carolina y es una pena porque después vuelan solitas, mira las dos mías ya fuera de casa, solo vienen algún que otro fin de semana a por más taper jajja, nos han dejado solitos.
    Bueno que decirle a tu princesa, que sea muy feliz éste y todos los días de su vida y que siga creciendo junto a esos maravillosos padres que tiene y a vosotros muchas felicidades por tener ese bombón de niña que tenéis. Besos enormes para los tres.

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  3. Ay ocho añitos!! disfrútala y dale todos los caprichos! que se pasan volando!! Muchas felicidades a esa pequeña que te va poniendo el listón mas alto con las tartas jajajaja Una preciosidad, y el corte precioso!!
    besitos

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  4. Que preciosidad Carolina, Laura tiene un tesoro por mama, y como siempre te digo chapooo, y aunque tarde felicidades a esa princesa, besos

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  5. Tu niña feliz! y una mamá orgullosa por ella y por el trabajo realizado.
    Besos Carolina, hoy desde
    http://siempreseraprimavera.blogspot.com.ar/2015/10/diferencia-entre-vitaminas-liposolubles.html

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  6. me encanta como te quedo carolina y el corte ya me enamaró jeje ahí en violeta, me parece genial y desde luego toda una delicia , que mejor que complacer a tu niña y verla disfrutar,besos

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  7. Qué grande se hace ya tu princesa!! Pero qué alegría ha de tener de poder celebrar su cumple con tan bonito bizcocho, muy elegante y seguro que rico.
    Besos.

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  8. Felicidades Laura, vaya tarta que te ha hecho mami ¿eh?, deliciosa como siempre. Seguro que te lo pasastes bomba

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