BOSTON CREAM MOUSSE PIE
sábado, septiembre 20, 2014
Llegó septiembre y con él, además de la vuelta al cole, vuelven los desafíos y no podrían empezar mejor que con un desafío dulce.
La propuesta que nos ha hecho M. Luz para este 25º Desafío en la cocina es un Boston Cream, un postre típico de Massachussets en el que se combinan una crema pastelera, una ganaché de chocolate y un bizcocho o parte "seca".
Ahora ustedes pensarán: "Si esta combinación me la he comido yo miles de veces". Y tienen razón.
Nosotros tenemos por aquí muchos dulces en los que se hace esta combinación: donuts, cañas, brazos de gitano, canutillos, etc...
Lo que pasa es que se da la circunstancia de que en Massachussets tienen una tarta en la que se combina un bizcocho, la crema y la ganaché, que es su postre oficial y que además la llaman Boston Cream Pie.
Pero M. Luz, que es muy buena, no nos ha pedido que hagamos la tarta tradicional, que también es una opción. Ella nos ha dado vía libre y nos ha pedido que hagamos nuestra versión de este postre.
En mi caso, desde que supe la propuesta, supe lo que iba a hacer: Una tarta mousse.
Ya, ya lo sé, lo mío es enfermizo, pero es que adoro este tipo de tartas.
Además se da la circunstancia de que yo había hecho con anterioridad la Tarta mousse de crema pastelera y lo que hice fue tunear mi propia receta, modificando las cantidades para acentuar aún más el sabor de la crema y, por supuesto, añadiendo la ganaché de chocolate.
El resultado, una tarta increíble, con un sabor suave en la que contrastan la crema y el chocolate.
Los ingredientes que usé fueron:
Para la base:
Lo primero que haremos, mejor el día antes de hacer la tarta, es preparar la crema pastelera para que esté bien fría cuando la vayamos a usar. Para hacer la tarta necesitaremos toda la crema que sale con la receta.
Una vez que tenemos la crema hecha, empezamos a hacer la tarta.
Primero, como siempre, engrasamos un molde desmontable de unos 26 cm. y lo forramos con papel de horno.
Yo lo coloco directamente en el plato de servir.
Ahora haremos la base de la tarta.
Ponemos la mantequilla en trozos en un calentador y la derretimos a fuego bajo.
Mientras ponemos las galletas troceadas en la picadora y las trituramos.
Una vez trituradas, añadimos la mantequilla derretida.
Seguimos picando las galletas, hasta que se quede una especie de masa medio compacta.
Volcamos la mezcla de galletas y mantequilla en el molde y repartimos bien por toda la base.
Presionamos bien y nos aseguramos de cubrir bien los bordes.
Reservamos la base en la nevera mientras preparamos la mousse.
Para la mousse lo primero que haremos será poner las hojas de gelatina a hidratar en agua fría, unos cinco minutos.
Ponemos la leche en un caldero y la calentamos.
Justo cuando rompa el hervor, apagamos el fuego y añadimos las hojas de gelatina escurridas.
Removemos enérgicamente con unas varillas manuales para que se disuelva bien.
Dejamos que esta mezcla se enfríe o entibie bastante.
Ahora ponemos en un bol amplio la crema pastelera y la leche con gelatina.
Batimos con el brazo de la batidora, con el accesorio de cuchillas.
Cuando esté a medio montar añadimos el azúcar en forma de lluvia y seguimos batiendo.
Seguimos batiendo hasta que esté bien firme.
Ahora volcamos la nata sobre la mezcla de crema y leche con gelatina.
Con una espátula y con movimientos envolventes, desde abajo hacia arriba vamos integrando las dos cremas.
Desde mi punto de vista y de acuerdo a la experiencia que tengo con este tipo de tartas, considero que este es uno de los pasos más importantes.
Debemos conseguir que la mezcla quede totalmente homogénea y que no se puedan distinguir las distintas cremas.
La mezcla obtenida la vertemos sobre la base de galletas reservada en la nevera.
Alisamos la superficie con una espátula.
Dejamos la tarta en la nevera hasta que cuaje totalmente. A mí siempre me gusta dejarla de un día para otro, aunque en unas cuatro o cinco horas ya esté cuajada.
Sólo nos queda la ganaché.
Ponemos la nata a calentar a fuego medio.
Mientras partimos el chocolate en trozos.
Justo cuando rompa el hervor la nata, apartamos del fuego, echamos el chocolate y la nuez de mantequilla y dejamos que repose un par de minutos.
Luego removemos con varillas hasta que se haya fundido todo el chocolate.
Dejamos que la ganaché se enfríe antes de verterla sobre la tarta.
A la hora de cubrir la tarta con el chocolate tenemos dos opciones; podemos dejarla sin desmoldar y echar el chocolate y así sólo quedará en la parte superior o podemos desmoldarla y cubrirla con el chocolate.
Yo opté por la segunda opción porque quería que quedara el chocolate resbalando sobre la mousse, por lo que retiré el aro y quité el papel de horno con cuidado.
Vertemos el chocolate sobre la tarta, dejándolo caer en el centro y sin tocarlo para que la cobertura quede lo más lisa posible.
Miren como brilla esa cobertura, que hasta se refleja el mantelito y como se ve chorreando por los laterales.
Eso sí, ya les digo que este brillo lo tendremos sin meter la tarta en la nevera, así que si la van a servir en casa recomiendo que la cubran con el chocolate justo en el momento en el que la vayan a servir.
Y aquí la foto del corte y el aspecto de la cobertura una vez que se ha refrigerado.
¿A que se ve apetecible?
Pues bien, esta es mi propuesta para este 25º Desafío en la cocina y ahora les invito a que se paseen por nuestro blog para que vean las distintas propuestas y versiones de todos los miembros del grupo. Seguro que se sorprenden con la gran variedad que han hecho. Pinchen aquí y les llevo directo.
Además les emplazo para el próximo 20 de octubre, en el que volveremos con un nuevo Desafío salado que nos vendrá de la mano de Rocío, de Chismes y cacharros. A ver con qué nos sorprende.
La propuesta que nos ha hecho M. Luz para este 25º Desafío en la cocina es un Boston Cream, un postre típico de Massachussets en el que se combinan una crema pastelera, una ganaché de chocolate y un bizcocho o parte "seca".
Ahora ustedes pensarán: "Si esta combinación me la he comido yo miles de veces". Y tienen razón.
Nosotros tenemos por aquí muchos dulces en los que se hace esta combinación: donuts, cañas, brazos de gitano, canutillos, etc...
Lo que pasa es que se da la circunstancia de que en Massachussets tienen una tarta en la que se combina un bizcocho, la crema y la ganaché, que es su postre oficial y que además la llaman Boston Cream Pie.
Pero M. Luz, que es muy buena, no nos ha pedido que hagamos la tarta tradicional, que también es una opción. Ella nos ha dado vía libre y nos ha pedido que hagamos nuestra versión de este postre.
En mi caso, desde que supe la propuesta, supe lo que iba a hacer: Una tarta mousse.
Ya, ya lo sé, lo mío es enfermizo, pero es que adoro este tipo de tartas.
Además se da la circunstancia de que yo había hecho con anterioridad la Tarta mousse de crema pastelera y lo que hice fue tunear mi propia receta, modificando las cantidades para acentuar aún más el sabor de la crema y, por supuesto, añadiendo la ganaché de chocolate.
El resultado, una tarta increíble, con un sabor suave en la que contrastan la crema y el chocolate.
Los ingredientes que usé fueron:
Para la base:
- 200 gr. de galletas tipo digestive.
- 100 gr. de mantequilla.
- Crema pastelera (Para ver la receta Pincha aquí).
- 500 ml. de nata para montar muy fría.
- Medio vaso de leche.
- Nueve hojas de gelatina (15 gr.).
- 100 gr. de azúcar.
Para la ganaché:
- 150 gr. de chocolate Nestlé postres.
- 150 ml. de nata.
- Un trozo de mantequilla (como del tamaño de una nuez).
Una vez que tenemos la crema hecha, empezamos a hacer la tarta.
Primero, como siempre, engrasamos un molde desmontable de unos 26 cm. y lo forramos con papel de horno.
Yo lo coloco directamente en el plato de servir.
Ahora haremos la base de la tarta.
Ponemos la mantequilla en trozos en un calentador y la derretimos a fuego bajo.
Mientras ponemos las galletas troceadas en la picadora y las trituramos.
Una vez trituradas, añadimos la mantequilla derretida.
Seguimos picando las galletas, hasta que se quede una especie de masa medio compacta.
Volcamos la mezcla de galletas y mantequilla en el molde y repartimos bien por toda la base.
Presionamos bien y nos aseguramos de cubrir bien los bordes.
Reservamos la base en la nevera mientras preparamos la mousse.
Para la mousse lo primero que haremos será poner las hojas de gelatina a hidratar en agua fría, unos cinco minutos.
Ponemos la leche en un caldero y la calentamos.
Justo cuando rompa el hervor, apagamos el fuego y añadimos las hojas de gelatina escurridas.
Removemos enérgicamente con unas varillas manuales para que se disuelva bien.
Dejamos que esta mezcla se enfríe o entibie bastante.
Ahora ponemos en un bol amplio la crema pastelera y la leche con gelatina.
Batimos con el brazo de la batidora, con el accesorio de cuchillas.
En otro bol ponemos la nata bien fría.
Empezamos a batir,Cuando esté a medio montar añadimos el azúcar en forma de lluvia y seguimos batiendo.
Seguimos batiendo hasta que esté bien firme.
Ahora volcamos la nata sobre la mezcla de crema y leche con gelatina.
Con una espátula y con movimientos envolventes, desde abajo hacia arriba vamos integrando las dos cremas.
Desde mi punto de vista y de acuerdo a la experiencia que tengo con este tipo de tartas, considero que este es uno de los pasos más importantes.
Debemos conseguir que la mezcla quede totalmente homogénea y que no se puedan distinguir las distintas cremas.
La mezcla obtenida la vertemos sobre la base de galletas reservada en la nevera.
Alisamos la superficie con una espátula.
Dejamos la tarta en la nevera hasta que cuaje totalmente. A mí siempre me gusta dejarla de un día para otro, aunque en unas cuatro o cinco horas ya esté cuajada.
Sólo nos queda la ganaché.
Ponemos la nata a calentar a fuego medio.
Mientras partimos el chocolate en trozos.
Justo cuando rompa el hervor la nata, apartamos del fuego, echamos el chocolate y la nuez de mantequilla y dejamos que repose un par de minutos.
Luego removemos con varillas hasta que se haya fundido todo el chocolate.
Dejamos que la ganaché se enfríe antes de verterla sobre la tarta.
A la hora de cubrir la tarta con el chocolate tenemos dos opciones; podemos dejarla sin desmoldar y echar el chocolate y así sólo quedará en la parte superior o podemos desmoldarla y cubrirla con el chocolate.
Yo opté por la segunda opción porque quería que quedara el chocolate resbalando sobre la mousse, por lo que retiré el aro y quité el papel de horno con cuidado.
Vertemos el chocolate sobre la tarta, dejándolo caer en el centro y sin tocarlo para que la cobertura quede lo más lisa posible.
Miren como brilla esa cobertura, que hasta se refleja el mantelito y como se ve chorreando por los laterales.
Eso sí, ya les digo que este brillo lo tendremos sin meter la tarta en la nevera, así que si la van a servir en casa recomiendo que la cubran con el chocolate justo en el momento en el que la vayan a servir.
Y aquí la foto del corte y el aspecto de la cobertura una vez que se ha refrigerado.
¿A que se ve apetecible?
Pues bien, esta es mi propuesta para este 25º Desafío en la cocina y ahora les invito a que se paseen por nuestro blog para que vean las distintas propuestas y versiones de todos los miembros del grupo. Seguro que se sorprenden con la gran variedad que han hecho. Pinchen aquí y les llevo directo.
Además les emplazo para el próximo 20 de octubre, en el que volveremos con un nuevo Desafío salado que nos vendrá de la mano de Rocío, de Chismes y cacharros. A ver con qué nos sorprende.
23 No te cortes y deja tu comentario.
Me encanta tu versión, te la copio seguro!!
ResponderEliminarVamos que para morirse del gusto solo mirando para él, Carolina!!. Que rico madre mía.
ResponderEliminarBesines
Me encanta debe de estar riquisimo!! Me apunto la receta con tu permiso. Besitos
ResponderEliminarME GUSTA MUCHISIMO LA IDEA DE LA MOUSSE. MUY ORIGINAL.
ResponderEliminarUN BESO
Bueno bueno Carlina... tu Boston Cream IMPRESIONANTE!!!! qué corte tiene y qué buenísimo tiene que estar con esa textura de mousse.
ResponderEliminarUn beso y muy buen fin de semana!!
Cómo no hacerlo tipo mousse si eres la reina de estas tartas jaja
ResponderEliminarAdemás de preciosa, te ha quedado seguro que bien rica.
Besotes, mi niña....me dejas babeando.
Es una versión que me gusta mucho, mas ligera y suave... la tengo que hacer, me encantan las mousses!! Bs.
ResponderEliminarJulia.
Que rico Carolina, te ha quedado estupendo. Me encanta tu versión!!!!!!!
ResponderEliminarQue manos tienes Carolina!!!tiene que estar para morirse de bueno!!!
ResponderEliminarMuchos besos!!!
Pues yo me uno a tu mousse, riquisima es poco viendo las fotos y genial paso a paso!
ResponderEliminarBesotesssss
Que presentación tan estupendisimaaaaa. Besos
ResponderEliminarNo necesitamos ir a Boston para disfrutar de esta rica tarta y a ti te ha quedado ejemplar. Ese chocolate derretido, mi perdición.
ResponderEliminarUn beso.
Holaaaa, mafre mía Caro, como te ha quedado esta tarta, que brillo, que colorrrrr!! es fantástica, me encannnnta.
ResponderEliminarUna auténtica pasada.
Un besooo
Madre mía, Carolina, que buena pinta tiene!!!!se ve delicioso!!!!
ResponderEliminarEsta versión la tengo que probar...
Besitos
Qué bueno! te ha quedado de muerte!
ResponderEliminarbesiños
Que pintaza Carol, que bonita te salen las tartas hija, dan ganas de tirarle un bocaito, un beso
ResponderEliminarPor dios Carolina, qué puesta en escena tan magnífica!!!! Me encanta la fotografía, y la receta por supuesto. Seguro que estaba deliciosa. Besos (Kris Is)
ResponderEliminarCarolina, me encanta! Tiene muy buen aspecto y muy apetecible.
ResponderEliminarBesos, Pilar
como no podía ser de otra forma.. si eres la reina de las tartas-mousse!!!
ResponderEliminarMe encanta tu versión, otra que anoto a la lista!
Awesome!!Me encanta!!! =)
ResponderEliminarPues mira una tarta te sirvió para la otra, así fuistes por seguro.
ResponderEliminarUna versión muy original, reina de las tartas
ufffffff presentación de 10!!!! la idea de que sea así estilo mousse mola muchisimo!!!!!! Impresionantee
ResponderEliminarDeliciosa y un corte espectacular.
ResponderEliminarBesos
Muchísimas gracias por dejar tu comentario.