Había decidido retomar la publicación en el blog porque ya me iba encontrando mejor y me podía meter en la cocina.
Pero hace justo diez días, el pasado 18 de diciembre, sufrí un contratiempo. Me dí un fuerte golpe en el ojo y, sin entrar en detalles del destrozo que me hice, supuso entrar de urgencia en el quirófano.
Afortunadamente ya pasó lo peor y me han salvado el ojo y hasta parece que la córnea, pero la recuperación es lenta.
Por eso, dejaré pasar al menos estas fiestas para seguir recuperándome tranquila.
Eso sí, tranquilos que para el día de Reyes ya me he pedido, por recomendación de algunas amigas, un casco protector y plástico de burbujas para protegerme y no volver a hacerme daño, jeje.
También quería aprovechar para agradecer a todas las personas que han confiado en mi y en mi blog para preparar sus menús navideños que, tal y como apuntan las estadísticas del blog, han sido muchísimas.
Disfruten de las fiestas y nos vemos pronto.