¿Qué les parece si hoy vamos con un platito de esos que se pueden dejar preparados en la nevera para comer bien fresquito a la vuelta de la playa o, incluso, para meter dentro de un tupper y comer debajo de la sombrilla? ¿A que apetece, verdad?
Pues bien, vamos a ella que es bien facilita y bien resultona.
Los ingredientes que usé fueron:
Mientras retiramos las nervaduras y las pepitas de los pimientos y los picamos bien pequeños.
Lavamos y troceamos también los tomates.
Pelamos y picamos también bien menuda la cebolla.
Lo ponemos todo en un bol.
Picamos los palitos de cangrejo.
Los añadimos al bol junto con el millo, lavado y escurrido.
Vaciamos los garbanzos en un colador y los lavamos bajo el grifo hasta que el agua salga bien limpia.
Los vertemos en el bol.
Pelamos y picamos los huevos y los incorporamos a la preparación.
Ahora preparamos la vinagreta. Yo la hago en un cacharrito que me es más fácil emulsionarla. Ponemos tres cucharadas soperas de aceite de oliva, una cucharada y media de vinagre de vino blanco, sal y pimienta negra. Tapamos el cacharrito y agitamos bien hasta que se emulsione.
Vertemos sobre los ingredientes y removemos cuidadosamente para que se mezclen bien. Cubrimos con film y guardamos en la nevera hasta el momento de comer.
En el momento de comer, servimos y disfrutamos.
Se los pongo más cerquita por si quieren meter el tenedor.
Un plato muy completo que podemos comer fresquito.
Pues bien, vamos a ella que es bien facilita y bien resultona.
Los ingredientes que usé fueron:
- 2 huevos.
- Un tarro de garbanzos cocidos (de unos 200 gr.)
- 8 palitos de cangrejo.
- 1/2 pimiento rojo.
- 1/2 pimiento verde.
- 2 tomates.
- Una cebolla pequeña.
- Una lata de millo de tamaño individual (maíz dulce).
- Aceite de oliva.
- Vinagre.
- Sal.
- Pimienta.
Mientras retiramos las nervaduras y las pepitas de los pimientos y los picamos bien pequeños.
Lavamos y troceamos también los tomates.
Pelamos y picamos también bien menuda la cebolla.
Lo ponemos todo en un bol.
Picamos los palitos de cangrejo.
Los añadimos al bol junto con el millo, lavado y escurrido.
Vaciamos los garbanzos en un colador y los lavamos bajo el grifo hasta que el agua salga bien limpia.
Los vertemos en el bol.
Pelamos y picamos los huevos y los incorporamos a la preparación.
Ahora preparamos la vinagreta. Yo la hago en un cacharrito que me es más fácil emulsionarla. Ponemos tres cucharadas soperas de aceite de oliva, una cucharada y media de vinagre de vino blanco, sal y pimienta negra. Tapamos el cacharrito y agitamos bien hasta que se emulsione.
Vertemos sobre los ingredientes y removemos cuidadosamente para que se mezclen bien. Cubrimos con film y guardamos en la nevera hasta el momento de comer.
En el momento de comer, servimos y disfrutamos.
Se los pongo más cerquita por si quieren meter el tenedor.
Un plato muy completo que podemos comer fresquito.